miércoles, 17 de diciembre de 2008

Despidiendome de la gran ciudad, de su calor... entre otras cosas.
Hay mil formas de despedirse de algo, aunque sea por un tiempo. Mi despedida empezó ayer.
Sin luz, sin agua, con un gran incendio.
Y con mucho calor.
Con amigos, y otras cosas.
Calor.
Hoy... con más amigos, mayores que los anteriores.
Más calor que antes.
En fin, duele despedirse, aunque se sufran las altas temperaturas, duele.
De todas formas, el dolor nunca es permanente.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Todo vaya por la Cábala

Oooo no.
Indeciso, tomar decisiones, y serán las más espontáneas de tu vida.